Cambiar el final de una historia es un ejercicio muy sencillo, pero divertidísimo para dejar volar tu imaginación y mejorar así tanto la creatividad como la comprensión lectora. ¿Qué hubiese ocurrido si a alguna de las hermanastras de Cenicienta le hubiera quedado bien el zapatito de cristal? ¿Y qué habría sido de Bella si hubiera logrado escapar con su padre del castillo de la Bestia? ¿Te imaginas cómo se habría sentido Blancanieves si en vez de encontrarse siete enanitos se hubiera topado con siete gigantes? ¡Anímate a reinventar estos cuentos populares!